Durante la tercera evaluación, y como avance al curso 2023/2024, estamos preparando una biblioteca de libros desplegables y pop-up en el Aula de Apoyo a la Integración. En principio, todos conocemos esta tipología de libros, pero, si bien podemos considerarlos como algo novedoso, realmente tienen varios siglos de tradición, pues las publicaciones con páginas desplegables nacieron hace más de 800 años como una «máquina filosófica», para más tarde evolucionar a manuales científicos y sobrevivir a día de hoy de una forma más lúdica y amena con mucho éxito entre los niños.
En realidad, los libros pop-up más antiguos no tienen ilustraciones deslumbrantes de castillos, bosques, reyes, reinas, dragones y hadas, sino que se hicieron en la Edad Media para facilitar la comprensión de los fenómenos naturales y religiosos. Posteriormente, en la Edad Media y principios del Renacimiento, la evolución natural de los libros pop-up estuvo a cargo de científicos de diferentes disciplinas. Los manuales de astronomía y medicina utilizaron las prácticas características de los pliegues y texturas para describir cosas como las fases de la luna y los cuerpos abiertos en disección.
En el siglo XVI, la prensa móvil de Gutenberg permitió una mayor difusión de libros, contribuyendo enormemente a la consolidación de las ideas del Renacimiento y al surgimiento de la Ilustración, y en el siglo XVIII se hicieron populares rápidamente, convirtiéndose en objetos de culto entre las clases altas de Inglaterra y Francia.
Ya en los siglos XIX y XX, las imprentas más modernas, las nuevas técnicas de plegado y la explosión del hábito de la lectura en los países ricos a partir del siglo XIX, supusieron una notable mejora de los libros pop-up, convirtiéndose en sofisticados objetos de información, entretenimiento e incluso decoración.
Hoy en día, a pesar del avance de las tecnologías digitales, los libros plegables siguen siendo populares entre niños y adultos, pues abrir un libro emergente es adentrarse en un mundo de detalles donde las historias cobran vida.
Nuestra idea es que esta biblioteca sea, como su propio nombre indica: desplegable, y que se pueda montar y desmontar en función de nuestras necesidades. Así, con este sentido itinerante y junto a una batería de actividades educativas elaboradas en el propio A.A.I., pasará por diferentes ubicaciones de nuestra localidad: Plaza de España, Plaza de Andalucía, Plaza de la Concordia, Plaza Miguel Murube, Parque de los Hermanamientos, Parque de las Marismas o los diferentes centros educativos que nos lo soliciten.
Prof. Francisco Ramos Moreno (PT).